Justicia creativa

Justicia creativa

¿Qué es lo que yo llamo Justicia Creativa? o ¿Qué podemos hacer  los profesionales para mejorar la Administración de Justicia, desde el punto de vista de las personas de “a pie”, de sus necesidades y sus expectativas? En este artículo intento responder a estas cuestiones.

Cuando alguien se ve obligado a acudir a un abogado o interponer una demanda, denuncia , en definitiva a solicitar el auxilio judicial, por lo general se lo ha pensado mucha veces, y no solo por el coste material que ello conlleva, sino porque “ abogado/a”, “ Tribunal”, “ Proceso” se asocia inevitablemente a “ problemas….”.

El abogado y la Administración de Justicia actúan para buscar una solución, no son el origen, sino el remedio a un problema.

Sin embargo, yo siempre he tratado de explicar que si alguien visita a un abogado/a, es porque el problema ya existe. El abogado/a y la Administración de Justicia actúan para buscar una solución. No son el origen, sino el remedio,- mejor o peor -, a un problema.

Cuando una persona nos explica el asunto que le trae a nuestra consulta,  lo clasificamos y le aplicamos  una determinada normativa. Y lo mismo ocurre en los Tribunales, donde se utilizan modelos de Sentencias o Autos, que se cortan y pegan de un asunto a otro, cambiando los nombres de los interesados, en el mejor de los casos, cuando no se les olvida.

Cada caso es único y diverso, como diferentes son los escenarios para ofrecer una solución adecuada.

Pero lo cierto es que cada caso es único y diverso, como diferentes son los escenarios que podemos plantearnos para ofrecer una solución adecuada.

Esto se refleja muy claramente en el Derecho de Familia, donde la evolución es constante, como lo son los modelos de familia, las condiciones personales, laborales y económicas de sus miembros, y en el derecho penal, donde ante unos mismos hechos típicos, nos encontramos con infinitas circunstancias, que podemos manejar de mejor o peor manera, para alcanzar el resultado más favorable a los intereses de nuestros clientes, o más justo, según la perspectiva y papel que ocupes como profesional.

Y es ahí donde entra en juego lo que yo he dado en llamar JUSTICIA CREATIVA.

Es importante que cambiemos nuestra perspectiva y nos abramos a nuevas ideas, que apliquemos la técnica del “brainstorming”, tanto en la consulta con el cliente, como en las negociaciones con otros letrados o en su caso con las otras partes en el proceso, incluido el Ministerio Fiscal. Que ofrezcamos al Juez o Tribunal ideas innovadoras y  herramientas  para facilitar que puedan aplicarlas.

Os voy a poner algunos ejemplos claros, varios de ellos relativos al Derecho de Familia.

¿Quién hubiera pensado en la España de los años 1990, en la custodia compartida como un modelo generalizado de sistema de custodia? E incluso años más tarde, cuando esta irrumpe en nuestro sistema judicial, en los múltiples modelos de custodia compartida que ahora conocemos.

Cada vez es más frecuente acudir a la práctica de la mediación en los procesos de familia, o a las derivaciones a servicios externos a la Administración de Justicia, como los Centros de Atención a las Familias, para la resolución de conflictos surgidos post-ruptura de la convivencia.

Y que decir del impulso que comienza a tomar la perspectiva de género como elemento equilibrador en la interpretación y aplicación de la norma, así como a la hora de abordar las nuevas reformas legislativas.

Todos estos avances, en cualquier ámbito del derecho, parten de la necesidad de adaptación e interpretación de la ley conforme a las nuevas realidades

Todos estos avances, en cualquier ámbito del derecho, parten de la necesidad de adaptación e interpretación de la ley conforme a las nuevas realidades, pero a su vez, para que esto sea posible, es necesario que todos los agentes implicados en este proceso, seamos conscientes de la necesidad de buscar soluciones y abrir puertas donde antes veíamos muros. No podemos olvidar que estamos tratando con personas de carne y hueso, no con papeles.

En efecto, los interesados pueden pasar por momentos duros, pensemos todo lo que se pone en juego en un proceso, pero nosotros podemos intentar que lo vivan como el camino hacia una nueva etapa, una salida, una solución y no como un problema.

Trabajo en equipo con otros profesionales

Una gran ayuda es trabajar en equipo o en red con otros profesionales. En mi Despacho por ejemplo trabajamos en contacto con una psicóloga y una médico–forense, de forma que el cliente cuenta, si lo desea, con una atención integral frente a muchas de sus inquietudes y no es rara la ocasión en que pasan de la consulta jurídica a la psicólogica y viceversa en una misma tarde. Toda herramienta es válida para reforzar el acompañamiento en el proceso judicial y no dudemos de que cualquier tipo de proceso suele tener un impacto emocional, mayor o menor en el que está inmerso en el mismo.

Si quieres compartir experiencias, ideas y remedios, que ayuden a mejorar la calidad de la justicia y sobre todo la satisfacción de los que necesitan de su auxilio, no dudes que siempre habrá otros profesionales que también estamos abiertos a ello.

Si quieres saber más o en caso de que necesites asesoramiento legal puedes ponerte en contacto con nuestro despacho.